martes, 23 de febrero de 2010

La Guerra del Líbano



Tras el Septiembre Negro de 1970, miles de guerrilleros palestinos son expulsados de Jordania y la OLP decide establecer sus bases en el Líbano, desde donde comenzaron a realizar incursiones en territorio israelí para provocar atentados, manteniendo enfrentamientos directos con las fuerzas israelíes a lo largo de la frontera sur del Líbano. En marzo de 1978, después de que un comando palestino causase la muerte de 35 civiles israelíes a bordo de un autobús, el gobierno de Menahem Begin ordena a tres brigadas del Tsahal que invadiesen unos 1000 kilómetros cuadrados del sur del Líbano, hasta el río Litani, con el objetivo de acabar con las bases de los fedayín. Antes de retirarse, tres meses después, Israel establece una "zona de seguridad" de 10 kilómetros de ancho y población cristiano-maronita y la deja en manos de la milicia aliada Ejército del Líbano Libre (después Ejército del Sur del Líbano). A su vez, la ONU despliega una fuerza de interposición (UNIFIL) entre la "zona de seguridad" y el río Litani con la misión de velar por la desmilitarización del área. Entre 1979 y 1981, la comunidad cristiana, a través de las Falanges libanesas, establece una alianza estratégica con Israel, una vez rota la que mantenían con Siria hasta entonces.

En junio de 1982 junto al recrudecimiento de los incidentes armados en la frontera o dentro de Israel, se produce un atentado del grupo palestino de Abu Nidal contra el embajador israelí en Londres. Eso proporciona el pretexto que esperaba Israel para invadir el Líbano, en una operación de grandes proporciones que denominará "Operación Paz para Galilea". Tres días después del atentado, el 6 de junio, un impresionante despliegue del Tsahal formado por casi 100.000 soldados (equivalente a ocho divisiones) y 1.500 tanques, apoyados por la aviación y la marina, supera la "zona de seguridad" y las fuerzas de la UNIFIL y profundizan en territorio libanés. Aunque la idea declarada por el entonces ministro de Defensa, Ariel Sharón, era no superar 40 kilómetros, las fuerzas del Tsahal llegan hasta la periferia de Beirut y la carretera que la une con Damasco. Los palestinos ofrecen una resistencia muy desigual, y Siria, que en un primer momento trata de esquivar el ataque, ante la progresión israelí se ve obligada a presentar batalla frontal, con 30.000 soldados y 400 tanques de refuerzo. Israel destruye el sistema de misiles antiaéreos sirio desplegado en la Bekaa libanesa y derriba 29 de los 100 aviones caza que Siria envía para protegerlos. El 11 de junio entra en vigor el alto el fuego impuesto por EE.UU., exigido también por la URSS y que Siria firma sin dudar y sin consultarlo siquiera con Arafat. Con la mediación estadounidense, comienza la evacuación de casi 15.000 combatientes y burócratas de la OLP y también de los soldados sirios. Portan su armamento ligero, en señal de capitulación honrosa: los sirios regresan a su país por vía terrestre, y los palestinos son transportados a Chipre, desde donde son dispersados a varios países (Argelia, Yemen, Iraq, Jordania, Sudán). La cúpula de la OLP, con Arafat a la cabeza, establece su nuevo cuartel general en Túnez.

Unos días después, el Parlamento libanés, ante la nueva correlación de fuerzas, elige al cristiano-maronita Bashir Gemayel, sustituyendo a Elias Sarkis, que ha agotado su mandato. Sin embargo, antes de tomar posesión, Gemayel es asesinado por un agente sirio, junto con otras 29 personas que se encontraban en ese momento en el cuartel general de las Falanges Libanesas en Beirut. En venganza por el asesinato, las Falanges Libanesas entraron en los campamentos de refugiados palestinos de Sabra y Chatila, provocando una masacre civil en la que murieron cientos de personas. Una comisión judicial israelí del más alto nivel –la Comisión Kahan– investigó lo sucedido. Señaló a los cristianos falangistas como autores materiales de las muertes, pero imputaba a Israel una «responsabilidad indirecta» por no haberla evitado al haberse producido los hechos bajo el control militar israelí de la ciudad, veredicto que provocó un hondo impacto en la opinión internacional y en la propia Israel, que destituyó al entonces ministro de Defensa, Ariel Sharon. Sin embargo, a pesar de la enorme repercusión internacional que tuvo este episodio, debe situarse en un contexto donde las matanzas de civiles fueron moneda habitual, antes y después de la presencia israelí, por parte de todos los contendientes en la guerra civil, aunque no gozaron en ningún caso de la misma atención mediática.

En mayo de 1983, Israel y Líbano alcanzaron un acuerdo para la retirada de las tropas israelíes. Sin embargo, el tratado de paz no llegó a ser ratificado y, en marzo de 1984, bajo presión siria, Líbano canceló el acuerdo. Ante el goteo de bajas israelíes y los constantes atentados chiíes (un promedio de 100 al mes), Israel inició su repliegue unilateral y progresivo en 1985, dejando de nuevo la llamada "zona de seguridad" (unos 850 kilómetros cuadrados) en manos del cristiano-libanés (y pro-israelí) Ejército del Sur del Líbano, con una presencia menor de tropas del Tsahal.

Finalmente, en mayo de 2000, Ehud Barak, primer ministro israelí, cumple su promesa electoral de retirar todas sus tropas del sur del Líbano, en cumplimiento de la resolución 425 del Consejo de Seguridad de la ONU. La ONU verificó in situ la retirada israelí al sur de la frontera internacional. Las granjas de Shebaa, un pequeño terreno de 20 kilómetros cuadrados en la falda del monte Hermón que el Tsahal tomó a los sirios en 1967, y que ahora Beirut reclama como propio, le sirvió a Hezbollah (la milicia chií proiraní) como pretexto para mantener su hostigamiento armado contra Israel y para no aceptar la resolución 1559 de la ONU, que la obligaba a desarmarse y dejar el control de la frontera en manos del ejército libanés.

En la actualidad la ONU mantiene fuerzas extranjeras, en labores humanitarias y de paz, en el Líbano. La pobreza y miseria en la que se vio sumida tras la guerra y la posterior postguerra hacen necesarios todo el apoyo económico y político para completar su desarrollo. La fuerza presente actualmente es, la denominada por la ONU, UNIFIL. La base internacional está dirigida por un General español, por ser la fuerza que se encuentra en mayor númeron (de 2000 efectivos, 1100 son españoles, con tan solo la presencia de 57 mujeres).


sábado, 13 de febrero de 2010

Alianza de la URSS con los paises arabes



La cooperación industrial, económica y militar durante todo el conflicto fue uno de los elementos claves en las relaciones entre la URSS y el mundo árabe. De hecho, a los países árabes. les correspondía dos tercios de todo el comercio soviético con el tercer mundo y un porcentaje aun mayor de las exportaciones industriales soviéticas

En el campo militar, con el apoyo de sus aliados en la región, la URSS pudo impedir la instalación de varias bases militares norteamericanas cerca de sus fronteras meridionales, y a su vez, consiguió bases navales en el Mediterráneo para contraponer el peso de la Sexta Flota de EE.UU. Las bases soviéticas se encontraban casi por todo el perímetro del mundo árabe.: Argelia, Trípoli, Latakia, Aden, Tunez y Alejandria (esta hasta 1974). La presencia de los azores y especialistas militares soviéticos en las guerras arabe-israelies en 1967 y 1973, se dio un impulso importante al desarrollo armamentista soviético

La cooperación militar se convirtió en importante palanca política en las relaciones de la URSS con muchos países árabes. en los `70. Un estimulo constante a esa linea de cooperación fue el fortalecimiento de los vínculos militares entre EE.UU. e Israel. Los suministros de armamento que inicialmente se inscribían dentro de la ayuda a los países de la región, se convertían en un atractivo negocio armamentista.

Así, en 1992 Libia le pago ya a Rusia 18 mil millones de dólares en divisa convertible y petróleo por la construcción de infraestructura de destinación militar. Esta cifra, no obstante, encubría un contenido macabro: detrás estaban enormes cantidades de armas e infraestructura militar. Según los funcionarios soviéticos de la época, la iniciativa en adquisición de armamento moderno, provenía de los líderes de los países árabes. que median sus necesidades comparando si potencial con el de Israel. Así, las dos superpotencias competían también en rellenar la región de todo tipo de armamento.

Aun con el apoyo socialista de la URSS, sus deficiencias y luchas internas que acabaron con la superpotencia, se trasladaron tambien a estos paises. No tenian punto de comparacion con el apoyo que daba (y da hoy en dia) EEUU a Israel.

Todas las especulaciones sobre cual de los bandos (Israel o los arabes) era mas poderoso, se vieron desmanteladas en multitud de ocasiones en las que Israel les conquistaba como si de un juego de niños se tratara.

viernes, 12 de febrero de 2010

Alianza de EEUU con Israel


Hace 40 años, mientras Estados Unidos estaba empantanado en Vietnam, Israel derrotaba a sus vecinos árabes en la Guerra de los Seis Días, que rediseñó el mapa político del Medio Oriente. Desde entonces, la relación entre Estados Unidos e Israel se fue transformando, con fin de la Guerra Fría y tras una serie de guerras entre israelíes y árabes, dos intifadas (levantamientos populares palestinos contra la ocupación) y la "guerra mundial contra el terrorismo" liderada por Washington, hasta alcanzar el actual grado de intrincada conexión.


En 1967, cuando estalló la Guerra de los Seis Días, Estados Unidos estaba ocupado en operaciones militares abiertas en Vietnam. La lucha de Israel por su reconocimiento como estado y sus choques con Egipto, Jordania y Siria eran apenas poco más que un pequeño punto en la pantalla de radar de Washington.

A finales de mayo de 1967, cuando el presidente egipcio Gamal Abdel Nasser (1956-1979) bloqueó el estratégico estrecho de Tirán, que conecta a Israel con el mar Rojo, Washington eligió la neutralidad y desestimó un pedido de ayuda israelí.

Cuando, en los primeros días de la guerra, Israel bombardeó preventivamente a la fuerza área egipcia mientras estaba en tierra, equipada con aviones soviéticos, utilizó cazabombarderos franceses. Esa fue una de las pocas ocasiones en las que Israel emplearía armas fabricadas fuera de Estados Unidos.

Tras la Guerra de los Seis Días, Washington se convirtió en el principal patrocinador y aliado estratégico de Israel.

"Antes de 1967, la comunidad judío-estadounidense no estaba realmente interesada por lo que pasaba en Israel", dijo a IPS el director de análisis de políticas del independiente Israel Policy Forum, M. J. Rosenberg.

Sin embargo, con su resonante victoria en la guerra y su expansión territorial --Israel ocupó la península del Sinaí, las alturas del Golán, la franja de Gaza, Transjordania y Jerusalén oriental, una superficie equivalente a casi tres veces la que tenía originalmente—se hizo evidente que era inevitable la creación de un estado judío. Fue entonces que la población estadounidense de ese origen comenzó a interesarse por lo que ocurría en Medio Oriente. A diferencia de los judíos, el resto de la población de Estados Unidos no estaba realmente "sintonizada" con lo que sucedía. Según una encuesta de la consultora Gallup, realizada durante los primeros tres días de la guerra de 1967, la mitad de los entrevistados no había tomado partido por ninguno de los dos bandos o carecía de información para hacerlo.

La elección de Washington se hizo evidente con rapidez. La ayuda de Estados Unidos a Israel creció exponencialmente, pasando de 24 millones de dólares en 1967 a 634 millones en 1971. Otro aumento en la asistencia se produjo después de la Guerra del Yom Kippur de 1973, cuando Egipto y Siria lanzaron un ataque sorpresa para recuperar parte del territorio perdido en 1967.
Ese conflicto de 16 días le demostró tanto a Estados Unidos como a Israel que el estado judío no era invencible. Washington se apresuró a reabastecerlo de armas y dinero, y los dos países acordaron un mayor nivel de cooperación en defensa ante futuras agresiones.

En esa época otro factor importante determinaba el papel de Estados Unidos en la región: la Guerra Fría. Medio Oriente estaba atrapado, tanto geográfica como políticamente, en los juegos de poder entre Moscú y Washington.
"Los países fueron forzados a ubicarse en uno u otro bando a causa de esta batalla entre las superpotencias", afirmó James Zogby, presidente y cofundador del grupo de presión Instituto Árabe Estadounidense.
Tanto Estados Unidos como la Unión Soviética ignoraron las condiciones particulares de las diferentes regiones en la que competían por la supremacía. Complejas cuestiones se resolvían a la luz de quién estaba en la esfera de influencia de cada una de las potencias, e Israel "era el buen tipo para Estados Unidos", dijo Zogby a IPS.

En Estados Unidos surgieron poderosos grupos de presión judío-estadounidenses que congregaron no sólo a voces destacadas sino también a influyentes donantes para las campañas políticas. Su influencia hizo pensar dos veces a más de un político acerca de la conveniencia de presionar demasiado para obtener determinados resultados en el conflicto de Medio Oriente.
Sin embargo, Estados Unidos ha sido un actor central en el proceso de paz durante los últimos 30 años. En 1977, el recién electo presidente Jimmy Carter se propuso revitalizar el entendimiento entre Israel y sus vecinos árabes.

Carter fue el arquitecto de los acuerdos de Camp David entre el presidente egipcio Anwar Sadat y el primer ministro israelí Menajem Begin, que abrieron el camino para el tratado de paz de 1979 que devolvió a Egipto la península del Sinaí y normalizó las relaciones entre los dos países.

Estados Unidos también entregó miles de millones de dólares a ambos gobiernos como parte de los acuerdos.

Desde 1979, Israel ha sido el país que más ayuda externa recibió de Estados Unidos. Ese año, por primera vez, la asistencia civil se dejó de lado mientras que la ayuda militar pasó de 1.800 a 2.400 millones de dólares. El gradual abandono de las donaciones para fines no militares fue parte de un programa para establecer la independencia fiscal de Israel, iniciado por el entonces primer ministro Benjamín Netanyahu.

En las semanas que siguieron a la guerra de 1967, Israel se apresuró a establecer puestos militares "temporales" en los territorios ocupados. Pero no pasó mucho tiempo hasta que los civiles comenzaron a trasladarse hacia ellos. Los que una vez fueron denominadas estaciones temporales se convirtieron en los asentamientos en expansión que hoy cubren Cisjordania y las alturas del Golán.
Aproximadamente 180.000 israelíes viven en las áreas anexadas de Jerusalén oriental y otros 16.000 colonos lo hacen en el Golán. En Cisjordania, los asentamientos que albergan a unos 250.000 israelíes controlan efectivamente cerca de 40 por ciento del territorio, en violación de la cuarta Convención de Ginebra, que prohíbe a la potencia ocupante establecer a su propia población en las áreas que domina.

Todos los presidentes estadounidenses desde Lyndon Johnson (1963-1969) se habían opuesto a los asentamientos israelíes, pero, en 2004, Bush prometió al primer ministro Ariel Sharon que grandes centros de población en Cisjordania quedarían en manos de Israel en cualquier negociación de paz futura.

Tras 20 años de ocupación, la intifada de 1987 introdujo al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) en la ecuación del conflicto entre Israel y Palestina.

Las frecuentes y violentas revueltas de la Organización para la Liberación de Palestina contra la ocupación israelí llamaron la atención del mundo nuevamente, pero determinaron que Estados Unidos, Israel, Japón y la Unión Europea la calificaran como de grupo terrorista.
Al actuar de esa manera, Estados Unidos e Israel le otorgaron a Hamas un papel clave en la región.

El fracaso en lograr que tanto los acuerdos de Camp David como los posteriores convenios de Oslo llevaran a la creación de un estado palestino convenció a muchos de que la estrategia de Al Fatah era incorrecta e hizo que vieran a los militantes islámicos como una alternativa.

A pesar de los esfuerzos de algunos presidentes estadounidenses para alcanzar una solución al prolongado conflicto árabe-israelí, esos siempre parecieron ser víctimas de la política interna.

"La presión interna alteró las decisiones de muchos presidentes", afirmó Zogby, y citó una carta firmada por casi 80 senadores pidiéndole al ex presidente Bill Clinton (1993-2001) que redujera su presión para que Netanyahu aceptara conversaciones de paz.

A fines de 2006, un documento del Grupo de Estudio sobre Iraq, creado por el Congreso legislativo, indicó que una renovada participación de Estados Unidos en el conflicto entre Israel y Palestina era fundamental para estabilizar todo Medio Oriente. Las recomendaciones fueron ignoradas por la administración de George W. Bush.

Seis meses más tarde, mientras la violencia azota a Iraq, esas propuestas retornaron a la mesa de discusión de la política exterior.

Esta alianza armamentistica que continua en la actualidad sigue nutriendo a Israel de armamento y recursos economicos principalmente, asi como para los Estados Unidos obtienen un importante aliado en su "guerra abierta" (palabras de GW Bush) contra los extremistas islamicos.

jueves, 11 de febrero de 2010

Diferencias.



Israel es uno de los doce países mejor armados en el mundo.

Esta nación posee la flota de aviones F-16 más grande del mundo, después de los Estados Unidos. También cuenta con aviones de combate Phantom F4-E, además de helicópteros Apache, Cobra y Blackhawk.

Su sistema de defensa está equipado con misiles de corto y largo alcance, bombas de gran tonelaje, además de lanzagranadas, rifles y pistolas de alto calibre.

También cuenta con un sistema antimisiles. Su flota naval está integrada por barcos de guerra equipados con armamento de última tecnología.

El ejército de Israel se desplaza en tanques y tanquetas.

Este país destina alrededor de un 20 por ciento de su presupuesto nacional en gastos de defensa. En el 2005, Israel invirtió casi 10 billones de dólares en gastos militares.

En contraste las fuerzas de Hezbolá tienen cohetes katyushka de corto, largo y mediano alcance, así como morteros de 82 milímetros.

Esto es parte del armamento con el que se libra la batalla en uno de los frentes del medio oriente.

Por otro lado, Siria, uno de los paises fronterizos contra los que Israel ha tenido unos cuantos conflictos ya... no tiene ni la mitad de producto interior bruto. Con lo que ni gastando todo su dinero, que proviene principalmente de la explotacion de pozos petroliferos y de la ganaderia ovina y vovina, no se acercarian ni de cerca a los 10 billones de Israel.

A parte de todo el dinero invertido por Israel, tiene otras grandes ventajas de su lado, como son la preparacion concienzuda de sus tropas, que sabiendolas escasas, arma tanto a hombres como a mujeres, y les da un adiestramiento muy largo y concienzudo.

Los musulmanes se cren invencibles por estar en su territorio, y rodeados de paises amigos, pero que Israle no los haya dominado es tan solo por unas cuantas resoluciones de la ONU.

miércoles, 10 de febrero de 2010

La Guerra de los Seis Días.

La Guerra de los seis días fue un conflicto armado que tuvo lugar en Oriente Medio en el año 1967. Advertido por la retirada de los Cascos Azules de la frontera del Sinaí, el bloqueo de los estrechos de Tirán y los movimientos de tropas de Egipto, Siria y Jordania al otro lado de la frontera, junto a la concentración de unidades iraquíes y kuwaitíes y de otros países árabes, Israel decidió pasar a la ofensiva para conjurar lo que suponía una inminente agresión y atacó a Egipto. Pese a que los medios de comunicación árabes prometían la destrucción y aniquilación de toda la población israelí, devolviendo al primer plano los recuerdos de la shoá, otras fuentes pusieron en duda, con posterioridad, que los árabes fuesen realmente a atacar Israel.

Durante el conflicto, Israel conquistó a Egipto la península del Sinaí hasta el Canal de Suez, iniciando con posterioridad un plan de colonización de la península. En 1973 Egipto recuperó la ribera este del Canal, durante la llamada guerra de Yom Kipur; en tanto las tropas israelíes, recuperadas de la sorpresa inicial, cruzaron el Canal, deteniéndose a 101 kilómetros de la capital de Egipto, El Cairo. Tras esta acción relámpago, Egipto fue el único (además Jordania) país árabe que firmó la paz con Israel, formalizada en los acuerdos de paz de Camp David, que tuvo como más señalado resultado la devolución de la península del Sinaí (exceptuando la Franja de Gaza), el reconocimiento del Estado de Israel por parte de Egipto, y el establecimiento de relaciones diplomáticas por primera vez entre Israel y uno de sus 4 países limítrofes, incluyendo el intercambio de embajadores.

También durante la guerra de 1967 conquistaría Israel los territorios de Cisjordania con Jerusalén Este, entonces bajo administración de Jordania, así como ocuparía los Altos del Golán, en territorio sirio. En octubre de 1973, durante la guerra de Yom Kipur, las tropas sirias atacaron las posiciones israelíes en los Altos del Golán, mientras que Egipto luchaba a lo largo del canal de Suez. Tras las primeras conquistas sirias, Israel expulsó a los sirios de los Altos del Golán y avanzó hasta llegar a 32 kilómetros de Damasco. Tras el acuerdo de cese de fuego firmado entre Siria e Israel en mayo de 1974, se estableció una zona desmilitarizada entre las posiciones sirias e israelíes. Israel incorporó los Altos del Golán a su sistema administrativo en 1981, en el Distrito Norte, si bien formalmente no los ha anexionado.

Dada la alta densidad de población árabe de todos estos territorios, Israel nunca propició la anexión de los mismos (salvo Jerusalén Este), manteniendo su presencia militar hasta el presente.


martes, 9 de febrero de 2010

Las dos monedas.


Ambas partes del conflicto son sumamente conservadoras y basan muchas de sus decisiones en justificaciones con dios. Estos actos, propios de la Edad Media, propician la inestabilidad política en ambos bandos. La gran diferencia que los separa, y que suele decantar la balanza hacia Israel es el tema económico.

Israel es considerado como el país más avanzado del sudoeste de Asia en el desarrollo económico e industrial. A pesar de los limitados recursos naturales, el desarrollo intensivo de la agricultura y el sector industrial durante las últimas décadas convirtió a Israel prácticamente en autosuficiente en la producción de alimentos. Sus importantes importaciones, son los combustibles fósiles, materias primas y equipo militar. Las principales exportaciones incluyen frutas, verduras, productos farmaceúticos, software, productos químicos, tecnología militar, y diamantes. Es líder mundial en la conservación del agua y la energía geotermica, y su desarrollo de tecnologías de vanguardia en software.

Territorios Palestinos es una de las denominaciones que recibe el territorio formado por las regiones de Cisjordania y la Franja de Gaza.

Debido al bloqueo que sufre la Franja, la zona continúa dependiendo económicamente de la ayuda humanitaria de la ONU, que llega a través de Israel, aunque los bloqueos militares dificultan esta ayuda. Las mujeres de Gaza trabajan por lo general en las labores del hogar, construyendo así las base de la sociedad (educando a los niños) o en las industrias locales de artesanía, ya que el hombre tiene la responsabilidad de mantener a su esposa e hijos.
Así, los ingresos familiares son obtenidos por los hombres y los hijos mayores, que trabajan en las industrias de servicios (36%), en la construcción (33%), en la agricultura (20%) y en otras actividades industriales (10%). Aproximadamente el 40% de estos puestos de trabajo se hallan en Israel; sin embargo, los problemas políticos interrumpen con frecuencia el flujo de trabajadores hacia ese país.

Así podemos comprobar que el flujo de ingresos para los palestinos es el propio Israel, lo que remarca aun mas su poder económico, lo que se refleja en su poderio armamentístico, en el que me centraré en la próxima entrada. Un saludo.

jueves, 4 de febrero de 2010

Conflicto árabe-israelí


El conflicto árabe-israelí es aquel entre el Estado de Israel y sus vecinos árabes, en particular los palestinos. Al día de hoy, las principales cuestiones son la soberanía de la Franja de Gaza y Cisjordania, la eventual formación de un Estado palestino en dichas áreas.

Origen del conflicto: Durante varios siglos; el pueblo judío vivió dividido en varios países del mundo, especialmente en Europa. Ya antes del comienzo de la 1ª Guerra Mundial existia un grupo de judios que defendían la llamada "Tierra Prometida" como el lugar en donde deberían vivir todos los judios, ya que su dios así lo dispuso.

Con el comienzo y desarrollo de la 1ª Guerra Mundial, se esparcieron y extendieron aun más por todo el mundo, lo que hizo que los defensores del semitismo extremo alzaran sus voces para reclamar la unidad del Pueblo.

La recien creada Organización de las Naciones Unidas (ONU) sacó varias resoluciones para devolver los territorios obtenidos con la Guerra a sus legítimos dueños, así como para cobrar un pago por tantas muertes a los paises vencedores.

Una de las resoluciones que saco (y desde mi punto de vista la más desafortunada) fue la creación del Estado de Israel como un nuevo país sacado de la manga. Devolviendole (por la fuerza) un territorio que los judios defienden historicamente como suyo, y que los árabes defienden con el mismo argumento.

Las divergencias y roces que surgieron a partir de "inventarse" un pais, fueron las que generaron un conflicto armado, que continua actualmente alternando momentos más sangrientos con otros más tranquilos.